miércoles, 20 de agosto de 2008

El retrato de Carlos V

Una de las cosas más interesantes que se pueden hacer en la actual exposición del Prado, El Retrato del Renacimiento, es comparar obras. Por ejemplo estos dos retratos.

Jacob Seisenegger (1505-1567) fue un pintor austriaco al servicio de Carlos V. Del emperador hizo varios retratos de cuerpo entero que al gusto de Carlos V eran troppo vero. Así que, éste, tomando como modelo el Carlos V con perro, de 1532, encargó una copia a Tiziano (1485-1576). El pintor veneciano con algunos retoques, 1533, lo presentó en la corte y Carlos V, quien, encantado, lo convirtió en su pintor de corte y amigo.



















Tiziano simplificó el cuadro, elimiando el detallismo realista, dulcificó los rasgos del retratado, lo estilizó y le dio ese aire elegante y mayestático que habrían de convertirse en rasgos del retrato de los habsburgo y en general del modelo de retrato cortesano en los siglos posteriores.

Si comparamos los dos retratos (pinchar en las imágenes) vemos la estilización de la figura, por parte de Tiziano, la pelliza más grande en detrimento del jubón, los párpados ligeramente más elevados, los labios más firmes, la nariz más clásica, la barba mejor recortada y, en general el gesto facial aparece con mayor determinación. La figura del emperador se muestra más cercana al simplificar los elementos que la rodean y bajar algo la línea del horizonte. Tiziano aplica la misma idealización al perro, del que han desaparecido las garras y la tensión muscular.

viernes, 20 de junio de 2008

La fortaleza de Montjuïc

Montjuïc es un promontorio situado al suroeste de Barcelona, desde donde se domina el puerto y la ciudad. El nombre quizá signifique Colina de los Judíos en catalán medieval o quizá sea una corrupción del latín Mons Jovicus (la Colina de Júpiter). La historia contemporánea de este recinto está llena de falsas atribuciones y mitos.

¿Levantó Felipe V la fortaleza de Montjuïc para reprimir Barcelona? ¿Sirvió de plataforma al ejército español para bombardear la capital de Catalunya? ¿Fue la gran prisión y patíbulo franquista? A unos cuantos políticos nacionalistas no les importa la verdad. Este artículo de Gabriel Cardona aclara las cosas.


Montjuïc, el gran camelo


GABRIEL CARDONA

EL PAÍS - 08-06-2008

El castillo de Montjuïc se levantó con finalidades militares y también sirvió como prisión, igual que todos los castillos del mundo. Sin embargo, las ciudades europeas cuidan y miman sus castillos como parte entrañable de su propia esencia, aunque hayan albergado presos sus mazmorras, disparado cañonazos sus bastiones y rodado cabezas en sus patios.

En cambio, Montjuïc, el castillo de Barcelona, sufre una empecinada campaña de desprestigio, alimentada por el oportunismo y el desconocimiento. Se ataca a la vieja fortaleza como si sus piedras fueran responsables de los disparates de nuestros antepasados y se la inculpa con tres argumentos esenciales: la levantó Felipe V para reprimir Barcelona, sirvió de plataforma al ejército español para bombardear la capital de Cataluña y fue la gran prisión y patíbulo franquista, nada de lo cual es cierto.

Felipe V hizo levantar la Ciutadella con finalidades represivas, pero no Montjuïc, cuyo primer recinto ya se había obrado 43 años antes de que naciera, precisamente durante la Guerra dels Segadors, a fin de que defendiera la ciudad de la amenaza del ejército real del marqués de Los Vélez. Durante la guerra de Sucesión, tuvo Montjuïc guarnición austracista, y el 21 de abril de 1706, la población civil barcelonesa se movilizó para defender su castillo del ataque de los borbónicos. La ampliación, que le dio su actual forma, no comenzó hasta 1751, cuando Felipe V ya llevaba muerto cinco años, y fue una meritoria edificación ilustrada, obra del ingeniero Juan Martín Cermeño, realizada durante los reinados de Fernando VI y Carlos III.


Los cañoneos contra Barcelona desde Montjuïc no fueron obra del odio castellano contra Cataluña, sino del enfrentamiento de dos generales progresistas contra el ala izquierda del progresismo popular, que tenía su feudo en la ciudad. El 3 de diciembre de 1842, Baldomero Espartero hizo bombardear Barcelona para reducir la rebeldía de quienes, poco antes, lo habían llevado al poder. Pero mucho más violento fue el cañoneo ordenado por Joan Prim i Prats, general y diputado progresista por Barcelona, que el 7 de septiembre de 1843 dañó o destruyó 460 edificios.


Tampoco fue el castillo una pieza básica en el aparato represivo de Franco. Durante la Guerra Civil, los republicanos fusilaron en la fortaleza a 37 militares y 21 civiles, y la utilizaron también como prisión. Cuando la guerra terminó, el principal escenario de los fusilamientos franquistas de Barcelona fue el Camp de la Bota y sólo fueron ejecutados en el castillo de Montjuïc el presidente Companys, el general Escobar y cinco mandos de la Guardia Civil. Tampoco fue el principal centro de reclusión barcelonés, sino la Modelo. En la montaña de Montjuïc se habilitaron como prisión dos edificios: el Palacio de las Misiones y el castillo, cuyo número de internos fue siempre muy inferior al de la cárcel.

Todas estas realidades son oscurecidas por falaces argumentos que presentan el castillo como símbolo de pasadas opresiones. Si seguimos por este camino, acabaremos condenando la catedral como expresión del oscurantismo eclesiástico, las atarazanas porque construían galeras de guerra y hasta el monumento a Colón por haber incitado el colonialismo.

El castillo de Montjïc es una joya histórica y arquitectónica, que contiene colecciones inapreciables. Entre ellas, numerosas piezas reunidas por Frederic Marès en todo el mundo, pistolas de Ripoll, cañones de la histórica fundición de Barcelona y la mejor muestra mundial de armas portátiles de la guerra civil de 1936-1939. Sin embargo, ya los primeros cañones han sido transportados a Madrid, porque eran símbolos del militarismo y el españolismo. A este paso, veo tomando el mismo camino al Cristo de Lepanto y los cuadros de Fortuny, por ser iconos del militarismo contra el Tercer Mundo, y las colecciones de Montjuïc pueden acabar instaladas en Zaragoza, donde ya tienen valedores esperando la oportunidad. Perder es siempre fácil. Recuperar puede ser imposible. A la pelea para rescatar los papeles de Salamanca puede suceder, dentro de un tiempo, la trifulca para recuperar las colecciones de Montjuïc.

Gabriel Cardona es historiador.

Hereu desmantelará el museo militar del castillo de Montjuïc.

jueves, 12 de junio de 2008

Estava el president de la Generalitat Lluís Companys em condicions psicològiques per governar?

En diverses ocasions s’ha especulat sobre la complexa personalitat del president de la Generalitat Lluís Companys, i fins s’ha posat en entredit la seva salut mental. L’advocat Amadeu Hurtado diu d’ell que era “bipolar” i el periodista Claudi Ametlla, que per comprendre la seva vida “desconcertant” calia tenir en compte “els dolorosos antecedents psicopatològics de la família”. El periodista Enric Vila a La veritat no necessita màrtirs ha suggerit que no estava em condicions psicològiques per governar.

Ara, apareix un retrat inèdit de Companys del metge i diputat al Parlament Joan Solé i Pla.

Un dia 1933, el doctor Solé i Pla anota en una quartilla la conversa mantinguda al matí amb el doctor Lluís Sayé, director del Servei d’Assistència Social dels Tuberculosos, amb qui ha coincidit durant una visita a la familia de Francesc Macià, mort el dia de Nadal: “En Companys en el fons és un malalt de la ment, un anormal excitable i depressible cíclicament; té fòbies violentes d’enveja i de grandesa violenta, arravatada, seguides de fòbies de por, de persecució, d’aclaparament extraordinari i a voltes ridícules. Quantes voltes el Sr.Macià, amb energia, renyant-lo, excitant-li l’amor propi l’havia tingut d’arrencar d’aquest aplanament en què plorava i gemegava com una dona enganyada!. A més diuen que la família és tèrbola. Al fill dissortadament la follia el té pres; i encara que molts homes siguin poc escrupulosos en relacions, ell ho fa i ha fet a l’estil gitanesc i sens escrúpols i amb cert abarraganament. Mala família per succeir a la d’en Macià en aquella Casa dels Canonges. No plau ni tant sols de pensar- hi, lo massa per ell [sic] i la vergonya per nosaltres”.

Solé i Pla descriu també el pas de Companys pel ministeri de Marina, durant el darrer semestre de l’any 1933. “Per ésser ministre, botava, plorava, sospirava (...). Arribà a la fi a ésser ministre a Madrid, de cop quedà tant parat i aixafat que res el feia tornar en si. Què feu ell a Marina? Sols posar en ridícul als catalans i a Catalunya per llocs de distracció i amb les dametesamb qui anava”.

Mentre Solé i Pla, en el Cafè de Catalunya, anotava la conversa matinal, va aparèixer Companys. La reunió extraordinària del ple del Parlament per a l’elecció del nou president de la Generalitat era convocada a les cinc d’aquella mateixa tarda. Quan s’adonà de la presència del doctor, el cridà, però aquest va fer veure que no el sentia. Quan a la fi el doctor l’anà a trobar, Companys li explica les seves intencions més immediates. “Em parla de les ganes que té d’ésser president de la Generalitat, que ell té les eleccions i les masses a les mans, que ell amb son nom pot guanyar, que vol que ens convencem d’ésser cada dia més nacionalistes, que ell serà si cal separatista, que no li fa por la república catalana. Que ha vingut per parlar amb mi, a qui votaré (vol que voti a n’ell com després es veurà), que ell és nostre amic, que ell necessita dues crosses per caminar, que ell ja té la republicana, que nosaltres podem proporcionar-li la Nacionalista, que ell es traurà de dins el passat i dolent, que son interior serà nou, bo, honorable”. [En el moment de succeir Macià, Companys, pel seu passat no nacionalista, necessitava canviar la seva imatge i oferir-ne una que esborrés el recel cap a ell dels sectors catalanistes més radicals]. Minuts després, Lluís Companys va sortir elegit per 56 diputats (ERC) a favor, 6 paperetes en blanc, i l’abstenció dels representants de la Lliga.

Que n’opinen els historiadors:

Josep Termes: el testimoni de Solé i Pla “és important perquè coneixia els principals actors polítics del moment de primera mà, un retrat psiquiàtric que lliga amb el seu passat bohemi”.

Josep Maria Solé i Sabaté: “de Companys s’ha dit, tot i que no de forma tan brutal i sagnant, que era ciclotímic, que passava estats d’enfonsament i que tenia una vida personal desordenada. El doctor era instruït i representava el món virginal, més pur, del catalanisme, enfront Companys que era un home intuïtiu i seductor, però era poc llegit, i per això el menystenia”.

Enric Ucelay Da Cal, “l’opinió del doctor és representativa”. El doctor Solé i Pla “no és el primer, ni l’últim, en valorar així en Companys perquè, en petit comitè, molts dels qui el varen conèixer en parlaven malament. Altra cosa és que ho fessin per escrit, sobretot després del seu afusellament”. Aquest podria ser el motiu, segons els historiadors, pel qual retrats com el de Solé i Pla sobre la figura del president de la Generalitat siguin escassos.

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sábado, 7 de junio de 2008

Las colonias industriales

En la se­gunda mitad del siglo XIX se levantaron 72 colonias indus­triales en torno a los grandes ríos de Cataluña, en especial el Ter y el Llobregat y de sus respectivos afluentes -Calders, Anoia, Fresser y Brugent. Constituyen el elemento más característico de su indus­trialización.

La colonia industrial se de­sarrolló en muchas zonas de Eu­ropa occidental desde media­dos del siglo XIX. Pero en Cata­luña destacan por su elevado número. Lo que buscaban estas ubicaciones junto a un río era aprovechar la energía hidráuli­ca necesaria para mover los tela­res en unos terrenos baratos.

Aunque diferentes, las colo­nias comparten un mismo es­quema urbanístico: un espacio productivo, donde están la fá­brica y las infraestructuras ne­cesarias para mover los telares; y otro doméstico, donde los tra­bajadores viven y cuentan con todos los servicios, como escue­la, café, teatro, economato, dis­pensario médico y, en algunas, cuartelillo de la Guardia Civil. Y en el punto más alto, la torre de amo, donde el propietario residía durante sus visitas se­manales o en verano.

La fórmula proporcionaba una excelente rentabilidad al dueño, ya que el absentismo era casi nulo y los gastos coti­dianos de los trabajadores, en la cantina, la barbería, el estan­co o el alquiler del piso rever­tían en la propiedad. Y si sobra­ba algo del sueldo se ingresaba en la sucursal bancaria de la co­lonia, por lo que se formaba un perfecto círculo autárquico. Por su parte, los colonos obte­nían un sueldo a fin de mes y acceso a una vivienda digna y barata (en 1900 el alquiler de una vivienda en las colonias os­cilaba entre 4 y 8 pesetas men­suales y el sueldo entre 15 y 30 semanales).

Según algunos historiado­res, las colonias surgieron con la intención de evitar los con­flictos laborales de las ciuda­des. Sin embargo, no siempre fueron espacios libres de tensio­nes y huelgas. Sobretodo a finales del siglo XIX, cuando las du­ras jornadas de más de 12 horas, los bajos sueldos y los accidentes laborales llevaron a pa­rar la producción durante me­ses. Estos conflictos termina­ron con expulsiones y el co­mienzo de un nuevo modelo de control: el paternalismo. Una especie de pacto no escrito en­tre el amo y sus colonos en el que una parte proporcionaba un puesto de trabajo, vivienda y servicios a cambio de trabajo y obediencia. El amo se preocu­paba del bienestar de sus traba­jadores personalmente o con ayuda del capellán (un asalaria­do más) que de forma cotidia­na o desde el altar exaltaba el papel protector del amo. No es de extrañar que en todas las co­lonias hubiera una iglesia, un capellán e incluso una comuni­dad de monjas que se ocupa­ban de la guardería y de la edu­cación de las niñas.

Información tomada de Del telar al loft. JOSÉ ÁNGEL MONTAÑÉS
El País, 6 de junio de 2008

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miércoles, 14 de mayo de 2008

Robert Rauschenberg

"No puedo imaginarme vivir sin confusión. Siempre he sido de la clase experimental".

En el otoño de 1953, Robert Rauschenberg pidió a Willem De Kooning uno de sus dibujos. El objetivo no era admirarlo, sino destruirlo. Durante un mes, Rauschenberg irá borrando los trazos al carboncillo y al óleo de De Kooning. El resultado será, Erased De Kooning Drawing, su manifiesto artístico, en negativo. Y el final de una época, la del expresionismo abstracto de Jackson Pollock y de Willem De Kooning, los representante máximos de la llamada escuela de Nueva York.

Cuando comience a pintar sus negros monocromos, donde la superficie, desconchada, agrietada, que más que pintada parece carbonizada, buscará sus aliados en el compositor John Cage y en el coreógrafo Merce Cunningham.

  • Un día le hice un bonito favor a John Cage. Entonces yo residía en su apartamento [el músico le había invitado a su casa, al comprobar que el único colchón que tenía el pintor estaba lleno de chinches]. En su ausencia, como agradecimiento –en esa época trabajaba en mis pinturas negras- repinté todos sus cuadros en negro. Se volvió furioso. Podría creerse que le gustaba cualquier cosa, pero no era cierto”.

Una mañana en que se levantó inspirado transformaría ese colchón en obra de arte al colocarlo en posición vertical y pintar encima, porque no tenía dinero para adquirir un lienzo.

Criado en el Sur de Estados Unidos, era hijo de un inmigrante alemán y de una india cherokee que le hacía sus camisas con los retales que encontraba. Tras un viaje por Italia, España y Marruecos, junto a Cy Twombly, entre 1952 y 1953, de vuelta a Nueva York, comenzará su pelea contra la pintura pura. Sus telas se llenan de todo tipo de materiales encontrados: plásticos, botellas rotas, paraguas, madera en Charlene, 1954;


fotos, carteles, periódicos en Rébus,1955. Combine painting será el nombre que designará a esta pintura, mezcla de collages, ensamblajes, color y dibujo.

Rauschenberg, junto a su amigo y amante Jasper Johns, con quien llegó a firmar como Matson Jones, marcó la transición entre el expresionismo abstracto y el arte pop en las artes visuales. Ambos buscarán su inspiración en la sociedad de consumo: fotografías de Kennedy, botellas de Coca-Cola, neumáticos de coches. De este modo prefiguran lo que será el pop art de Andy Warhol.

Son muchas las anécdotas relacionadas por su gusto por la provocación: complació a un crítico que en Florencia le sugirió que arrojara algunas de sus obras al río Arno. A una mujer que le comentó que no le gustaban los cuadros que colgaban en el Museo Judío de Nueva Cork, Rauschenberg le dijo que opinaba lo mismo de cómo ella iba vestida. La mujer, ofendida al principio, “me buscó luego para decirme que empezaba a entender”.

En sus últimos años en la isla de Captiva en Florida, fue juntando tierra hasta formar un complejo de nueve estudios y varias viviendas circunvalando una piscina. Allí realizó sus grandes obras, de hasta varios kilómetros de extensión.

De la época en que a Rauchenberg le dió por llenar las galerías de lienzos blancos -“hipersensitivos”, según él, pues las telas eran capaces de captar las variaciones de actitud y de humor de los espectadores-, procede «4,33», la célebre canción silenciosa de John Cage.

lunes, 12 de mayo de 2008

El nacionalisme als inicis del segle XX

A finals del segle XIX, neixen a Catalunya i el País Basc moviments que qüestionen l’existència d’una única nació espanyola. El punt de partida d’aquestes noves ideologies es que Catalunya i el País Basc son nacions i que tenen dret a l’autogovern. Ho justifiquen afirmant que ambdues tenen realitats diferencials: la llengua, principalment, però també uns drets històrics (furs), una cultura i uns costums propis. Al llarg del primer terç del segle XX, aquestes s’aniran definint en torn a plantejaments més o menys radicals: des de l’autonomisme fins a l’independentisme.

Les diferències ideològiques en aquest camp son molt grans, per exemple entre Valentí Almirall i Enric Prat de la Riba, entre Francesc Cambó i Francesc Macià, com també entre el nacionalisme català i el basc.

És difícil, per exemple, que qualsevol polític nacionalista català pogués defendre mai idees com les de Sabino Arana.

“... Lo que de bueno tiene el vasco no se lo debe a Castilla y hermanas. De lo malo, casi todo lo tiene de ellas recibido.

No hablemos de la navaja, ni de la blasfemia, ni de los cantares, ni de las danzas, ni de las ideas librepensadoras... Todo eso hiede.

Los etnógrafos extranjeros admíranse de la sociedad y de las costumbres vascas; los obispos de diócesis extrañas se hacen lenguas ponderando la religiosidad del vasco...

Pero procedentes del lado de allá del Ebro penetran otras costumbres que van sustituyendo a las vascas...El euskera se muere. Es verdad.

No lo mata el extraño. Los mismos vascos le están dando la muerte...

Su lengua era maravillosa, monumento de los tiempos primitivos, testimonio de su innata independencia, timbre y sello firmísimo de su nacionalidad. Pero los vascos no apreciaban su nacionalidad, ni amaban su independencia...

El euskera, hoy, de nada vale. Al contrario, es un obstáculo, un estorbo para todo: para educarse, para estudiar, para el comercio, para la vida. Los ricos y los ilustrados habéis llegado a esa posición hablando español. ¿Por qué del aldeano queréis exigir que no lo aprenda, o al menos que no lo hable? ¿Es que no queréis que se iguales a vosotros en riqueza y conocimientos?

Sabino Arana, Euzkadi, nº 3. 1901.

Exercici.

domingo, 11 de mayo de 2008

Arte del Siglo XX

"Recordad que un cuadro antes que un caballo, una mujer, una flor, es esencialmente una superficie plana cubierta de colores dispuestos en un cierto orden". Maurice Denis.

W.Kandisnky: Composició IV

En el arte del siglo XX la historia de la pintura es la historia de la desaparición del objeto. El centro de interés de los pintores fauvistas fue el color. Preparaban la superficie del cuadro con un color y sobre él distribuían las zonas repintadas buscando armonías. Los cubistas buscaron en la geometría una nueva forma de representar el objeto sin privilegiar un único punto de vista. Los expresionistas mostraban la realidad distorsionada por las emociones y los futuristas quisieron atrapar las fases del movimiento en un solo plano. El surrealismo quiso puentear la conciencia para mostrar la realidad subyacente. La abstracción, por fin, se queda con las solas formas geométricas –en Europa- o con la fuerza significativa del color –en EE UU.

L. SULLIVAN (Escuela de Chicago): "La forma sigue a la función".

Mies van der Rohe: Pavelló Alemany (Barcelona)

En el siglo XX desaparece la unidad de estilo que caracterizaba las épocas pasadas: ya no hay el estilo que define una época, sino concepciones artísticas diversas que conviven en un mismo periodo. Variedad y complejidad en las formas y aparición de nuevos formatos, la fotografía y el cine, más cercanos al gran público. En arquitectura, la combinación de materiales antiguos (hierro, vidrio), nuevos (cemento, acero, plásticos) e inesperados (papel, tela) permiten composiciones antes inconcebibles y una amplitud extraordinaria del campo de la estética.

Se produce una ruptura definitiva con la arquitectura de ascendencia clásica y con ella el privilegio de los exteriores y la ornamentación, frente a las acuciantes necesidades que plantea la sociedad industrial. Para los nuevos arquitectos el espacio interior y la función del edificio determinan la nueva estética. Aeropuertos, estaciones de ferrocarril, rascacielos, fábricas, estadios. El arquitecto es al mismo tiempo arquitecto, ingeniero y urbanista. La estética del siglo XX se mueve entre la funcionalidad del edificio, búsqueda de la simplicidad, y la articulación con la naturaleza.


Henry Moore's 'Reclining Figure' 1969-70

También la escultura quiso superar las fórmulas de la antigüedad clásica. A ello contribuyó la búsqueda de nuevas formas que antes que nada tenían en cuenta la naturaleza del material. La tendencia hacia una estructura plástica casi arquitectónica –escultura civil para señalar grandes espacios públicos-, la experimentación con los nuevos materiales: piedra, metal, plásticos, la importancia concedida al espacio, al vacío y al movimiento.


viernes, 9 de mayo de 2008

La situación política española tras 1934


A partir de la revolución de 1934 -revolución socialista en Asturias, proclamación de la República Catalana por Companys desde el balcón de la Generalitat-, las posiciones políticas españolas se extremaron, formándose dos grandes grupos antagónicos:

Las Derechas:

La CEDA de Gil Robles que atendía a los intereses de las clases medias y populares católicas, con unas juventudes -Juventudes de Acción Popular (JAP)- con rasgos claramente fascistas,

La Renovación Española, el partido monárquico de Calvo Sotelo, que se fue radicalizando progresivamente,

La Falange Española de José Antonio Primo de Rivera, fusionada en 1934 con las JONS de Ledesma que representaban el fascismo español.

Las Izquierdas:

La Izquierda Republicana de Manuel Azaña, el partido burgués con vocación republicana modernizadora,

El PSOE, que entre sus dos almas la de Besteiro e Indalecio Prieto y la de Largo Caballero, el Lenin español, como se le decía, fue optando por las ideas revolucionarias de este último,

El PCE, cuyo programa en ese momento era el Frente popular contra el fascismo (Hitler había tomado el poder en 1933).

La CNT, por su parte, decaída tras el fracaso de la insurrección de diciembre de 1933, buscaba cómo apoyar al Frente popular sin desdecirse de la abstención electoral que siempre había promovido.

La Esquerra Republicana de Catalunya de Lluis Companys, giraba a la izquierda desde sus posiciones independentistas.

PUNTOS PROGRAMÁTICOS DE FALANGE ESPAÑOLA. 1934

“1.- Creemos en la suprema realidad de España. Fortalecerla, elevarla y engrandecerla es la apremiante tarea colectiva de todos los españoles...

2.- España es una unidad de destino en lo universal... Todo separatismo es un crimen que no perdonaremos. La Constitución vigente... atenta contra la unidad de destino de España. Por eso exigimos su anulación fulminante.

3.- Tenemos voluntad de Imperio. Afirmamos que la plenitud histórica de España es el Imperio. Reclamamos para España un puesto preeminente en Europa...

4.- Devolveremos al Ejército de Tierra, Mar y Aire toda la dignidad pública que merece, y haremos a su imagen, que un sentido militar de la vida informe toda la existencia española.

5.- Nuestro Estado será un instrumento totalitario al servicio de la integridad de la patria. Todos los españoles participarán en él a través de su función familiar, municipal y sindical. Nadie participará a través de partidos políticos. Se abolirá implacablemente el sistema de partidos políticos con todas sus consecuencias.

6.- Concebimos a España, en lo económico, como un gigantesco sindicato de productores. Organizaremos corporativamente a la sociedad española mediante un sistema de sindicatos verticales por ramas de producción...

7.- Repudiamos el sistema capitalista... Nuestro sentido espiritual y nacional repudia también el marxismo...

26.- Falange Española de las JONS quiere un orden nuevo, enunciado en los anteriores principios. Para implantarlo, en pugna con las resistencias del orden vigente, aspira a la revolución social...”

**

Ejercicio.

martes, 6 de mayo de 2008

Mayo del 68

"Así como se necesitó toda una pedagogía del trabajo para convertir a las personas en obreros, también fue precisa una formidable educación del deseo para hacer de los individuos mano de obra consumidora. Igual que los primeros obreros se resistieron a la disciplina laboral en los inicios de la sociedad industrial, Mayo del 68 fue una rebelión desordenada contra esa nueva pedagogía del deseo, y por eso surgió en plena instalación de la sociedad de consumo”.

¿Dónde estuvo el epicentro de la revolución?

Anthony Giddens: “Desde una perspectiva europea podría parecer que París fue el foco principal de 1968, pero créanme que no fue así. En Europa los radicales eran bastante tradicionales. Se proclamaban heraldos de una nueva era, pero se comportaban de forma muy similar a la de los radicales de toda la vida. Eran estudiantes que asolaban todo a su paso y su radicalismo no profundizaba. En California, al menos para mucha gente, si eras radical tenías que serlo hasta el fondo, no sólo políticamente, sino en casi todos los aspectos de tu forma de vida. Incluyendo la educación”.

Le Monde: “Mais c'est en France que l'éclosion de cette génération a pris la forme d'un choc frontal avec le pouvoir, ébranlé au point que le président de la République, Charles de Gaulle, a failli se retirer, avant de reprendre le contrôle de la situation (…) Des évolutions similaires se sont produites ailleurs, sans pavés et sans lyrisme”.

Edgar Morin: “Mayo del 68 francés no fue la primera [revuelta estudiantil], sino todo lo contrario, fue más bien la culminación (...) Las había en el mundo occidental, pero también en Egipto, en Polonia, en Checoslovaquia...”.

Fernando Savater: “Del eco que esos sucesos tenían en Europa da cuenta una entrevista a Cohn-Bendit (Le Magazine Littéraire, Mayo del 68): el entrevistador le dice que "si tomamos el ejemplo del movimiento estudiantil en Madrid, se ve que la diferencia -y los riesgos- son mucho más importantes que entre vosotros", cosa que Dany acepta sin remolonear”.

Conocí a un estricto profesor de matemáticas, con su típica camisa de cuello abotonado, pelo bien cortado y saludable vida matrimonial, que desapareció del campus durante varios meses. Un buen día iba caminando a clase cuando una especie de Cristo apareció por encima de una colina. La melena rubia le caía por debajo de los hombros, lucía una larga barba y llevaba una túnica amplia y sandalias abiertas. Hasta que no se paró y me saludó no le reconocí. Había dejado las matemáticas y la universidad, también a su esposa y sus hijos, y se había trasladado al desierto de Nuevo México, donde trabajaba como artesano en una comuna”.

¿En qué consistió mayo del 68?

Le Monde: “Politiquement, il a annoncé la fin du gaullisme et du communisme, même si l'un et l'autre ont perduré jusque dans les années 1980. Socialement, il a mis à l'ordre du jour la recherche du temps libre et de l'épanouissement personnel. Moralement, il a renversé l'ordre familial et patriarcal traditionnel. Idéologiquement, il a mis en question les valeurs et les tabous hérités du nationalisme ”.

Anthony Giddens: “Lo importante de 1968 no fueron sólo sus movimientos, sino la amplitud de los cambios soterrados que la sociedad venía experimentando desde finales de la década de 1950 y de los que dichos movimientos eran un reflejo. (...) Afectan a la naturaleza de la familia, que ha dejado de girar en torno al matrimonio para hacer hincapié en la calidad de las relaciones, (...) a la sexualidad, (...) la entrada masiva de la mujer en el mercado de trabajo, (...) la necesidad de elegir una forma de vida, y no de heredarla, junto a la aparición de la política de la identidad, el declive de la deferencia y un enfoque más crítico de la elección política”.

Edgar Morin: “Por supuesto, el denominador común era una revuelta contra la autoridad que tenía características diferentes. En Europa del Este era contra la dictadura del partido; en los países occidentales era, a la vez, la de la familia, es decir, la autoridad paternal, la de los catedráticos de la Universidad y la del Estado (...) La total inhibición del poder del Estado liberó a mucha gente de sus enfermedades psicosomáticas, de sus neurosis. Los gabinetes de los psicoanalistas y los psiquiatras se vaciaron”.

Diez años después recibí una carta [del profesor de matemáticas] del conocido que había experimentado la conversión. Había vuelto con su esposa, a su corte de pelo de siempre y a su ropa pija, también a su antigua casa, y buscaba trabajo en su antiguo departamento”.

Qué queda de Mayo del 68:

Fernando Savater: “Sus efectos parcialmente revolucionarios se encuentran hoy por todas partes, en la condición de las mujeres, en la aceptación de opciones sexuales antes perseguidas, en la presencia de los individuos en el espacio público, en el descrédito del militarismo y del totalitarismo comunista, en las ONGs (...) Creo que nos dio cierta libertad de espíritu y que "no moriremos idiotas" o, por lo menos, no tanto como otros”.

Las pintadas de Mayo del 68

Prohibido prohibir

Corre camarada, el mundo viejo te persigue

Tomad vuestros deseos por realidad

Sed realistas, pedid lo imposible

La imaginación al poder

miércoles, 30 de abril de 2008

El Dos de Mayo y la nación política

Tras el Motín de Aranjuez (17 de marzo de 1808) -el pueblo deteniendo a los reyes que huyen-, Madrid es ocupada por el general Murat (23 de marzo). Fernando VII y su padre son llevados a Bayona donde Napoleón les obliga a abdicar en favor de José Bonaparte.

El 2 de mayo de 1808, la multitud concentrada ante el Palacio Real teme que el infante Francisco de Paula corra la misma suerte. Al grito de ¡Que nos lo llevan!, el gentío penetra en el palacio. Un batallón de granaderos de la Guardia Imperial de Murat, acompañado de artillería, disparan contra la multitud. La lucha se extenderá por todo Madrid y durará horas. Acuchillamientos, degollamientos, detenciones. Cientos de españoles, hombres y mujeres, y soldados franceses murieron en la refriega. La Carga de los Mamelucos de Goya refleja la lucha de ese día. Estos sucesos serán el inicio de un huracán político que transformará la historia de España.


Para muchos, el dos de Mayo, hace justo 200 años, es el inicio de la nación española, la nación política liberal, definida por la constitución, que concede la soberanía al pueblo. Otros se muestran más escépticos porque creen que no existía un sujeto colectivo que pudiese encarnar tal soberanía. No habría masa intelectual suficiente, ni una burguesía poderosa, ni clase media.

El historiador Antonio Elorza defiende que fue precisamente el vacío provocado por el abandono del rey, Carlos IV, y su delfín, Fernando VII, ante el invasor, lo que hizo posible que surgiese la soberanía nacional, junto al empeño por conseguir la libertad. Recuerda Elorza que un notable de la época, Juan Pérez Villamil, ya decía: "La nación española con esta gran turbación debe entrar en un nuevo ser político" mediante una Constitución que destierre "el monstruo del despotismo", de acuerdo con el principio de que "los reyes son para el pueblo y no el pueblo para los reyes". Y el diputado asturiano Agustín Argüelles, al presentar la Constitución de 1812, declaró “españoles, ya tenéis patria”.

Más modernas parecen las palabras que Antonio de Capmany escribiera en su Centinela contra franceses (1808), haciéndose eco de que por debajo de la nación política que el liberalismo estaba alumbrando subyacían las naciones que componían la monarquía hispánica: "Cada provincia se esperezó y sacudió a su manera. ¿Qué sería ya de los españoles si no hubiera habido aragoneses, valencianos, murcianos, andaluces, asturianos, gallegos, etcétera? Cada uno de estos nombres inflama y envanece, y de estas pequeñas naciones se compone la masa de la gran Nación...".

lunes, 28 de abril de 2008

El Manifiesto de Lausana

Uno de los primeros intentos por derrocar a Franco fue la conspiración de Don Juan, el heredero de Alfonso XIII, con algunos de los generales que habían ayudado a Franco a ganar la guerra civil. Fruto de esa conspiración fue el Manifiesto de Lausana del 19 de marzo de 1945. En él, Don Juan denunciaba la naturaleza totalitaria del franquismo, sus relaciones con la Alemania Nazi y pedía a Franco que diese paso a la restauración de la monarquía.


En su reciente, El gran manipulador, el historiador británico Paul Preston escribe cómo se formó un grupo de generales monárquicos con el general Aranda, Alfonso de Orleans y Kindelán, con el fin de supervisar la vuelta a la monarquía. Llegaron a elaborar el texto de un decreto-ley que anunciaba la restauración y formaron un Gobierno provisional en el que Kindelán sería presidente; Aranda, ministro de la Defensa Nacional; Varela, ministro del Aire, y el general Juan Bautista Sánchez González, ministro del Ejército. El manifiesto no tuvo mayor trascendencia porque Franco lo desbarató, confinando a alguno de los conspiradores y controlando a otros haciendo la vista gorda ante los asuntos de corrupción en que estaban implicados.

sábado, 12 de abril de 2008

Libertad o igualdad

La ideología de los padres fundadores se forjó sobre los dos ejes de las coordenadas de la modernidad, que hizo famosos la Revolución Francesa: la libertad y la igualdad. Si la estrella polar era la libertad, la ideología se denominó liberalismo; si fue la segunda, entonces se denominó socialismo. Los movimientos políticos del siglo XX se pueden definir atendiendo a cómo se situaron con respecto a esos dos ejes. Así el comunismo fue un movimiento que se declaraba igualitario y desdeñaba la libertad; su opuesto el conservadurismo se definía o define como liberal, afirmando además la desigualdad natural de las personas. El anarquismo creía compatibles la mayor igualdad con la mayor libertad y su enemigo, el fascismo, la desigualdad y el autoritarismo. Los movimientos políticos más centrados, menos radicales, han sido y son los constituyentes de la democracia, el liberalismo y el socialismo, cada uno de ellos afirmando un eje por encima del otro. Los partidos actuales tienden hacia el centrismo, intentando combinar ambas ideas, y se sustentan en ideologías como la socialdemocracia o el social liberalismo.

La primera ideología de la modernidad fue el liberalismo, forjado en su antagonismo con el Antiguo Régimen, al que combatía en su dimensión absolutista (monarquía) y oscurantista (religión católica). John Locke, Adam Smith, Edmund Burke, Thomas Paine, Tocqueville, Stuart Mill, Von Hayek, y los ilustrados franceses dieron ese combate y, sobre la base de la racionalidad y de los intereses del individuo como motor de la comunidad libre y autónoma, defendieron ideas tales como “el derecho a la vida y a la integridad física; el derecho a la propiedad y al trabajo, que es el que nos asegura nuestra subsistencia, y el derecho a la libertad y a la crítica, que son los que nos garantizan el poder elegir lo que más nos conviene”. Los liberales creen en la eficacia igualitaria del intercambio de bienes y servicios. El mercado, según ellos, es capaz de autorregularse, gracias al juego de los intereses particulares de los individuos (la mano invisible de Adam Smith) y la suma de los fines de los individuos redundará en bien de la comunidad eliminando las clases ociosas y la injusticia.

domingo, 6 de abril de 2008

Los arqueólogos franquistas colaboraron con los nazis en la fantasía de la raza aria

Entre 1936 y 1945, los arqueólogos franquistas, en especial, Julio Martínez Santa Olalla, comisario general de Excavaciones, jugaron con la idea de la “arianización de España” por los celtas, menospreciando de paso a la cultura ibérica.

Santa Olalla con Himmler en Madrid, en 1940.

Su interés se centró en el arte rupestre, los visigodos y sobre todo en la cultura antigua de las Canarias, donde “los nazis confiaban encontrar testimonios de una ancestral raza aria pura de la que serían miembros los primitivos canarios. El prehistoriador de la organización (Ahnenerbe, Herencia ancestral Alemana) Hermann Wirth, que buscaba la Atlántida, consideraba que las islas eran restos meridionales del gran continente sumergido, patria de origen de los arios. La expedición debía realizarla en 1939 Otto Huth, otro de los investigadores de la Ahnenerbe, especialista en antiguas creencias espirituales arias, que proyectaba rastrear las viejas prácticas religiosas de los isleños y estaba entusiasmado con los rumores de momias guanches de trenzas rubias. Excavarían y harían mediciones craneales de los canarios”.

jueves, 27 de marzo de 2008

Solidaritat catalana - Solidaritat obrera

Solidaritat Catalana (1906-1909) tuvo un éxito que probablemente sorprendió a la propia empresa. En las elecciones de 1907 obtuvo 41 de los 44 escaños que se elegían en Cataluña. Nunca el catalanismo tuvo un triunfo mayor. Esta agrupación electoral fue un movimiento unitario que recogía el espíritu catalanista de la Liga Regionalista de Prat de la Riba, de los carlistas, de los republicanos nacionalistas y de los republicanos federales (dejando fuera los partidos dinásticos y los republicanos de Lerroux). La agrupación no duró más allá de la Semana Trágica (1909), debido a la diferencia de intereses de sus integrantes y porque una parte de la población, como ahora, no veía las cosas del mismo modo que el de estos intelectuales y políticos catalanistas. De las dos almas de Cataluña, como impropiamente les gusta decir a algunos, hablan los nombres que entonces y ahora escogen para definirse las tendencias opuestas. Así frente a las burguesías grande y pequeña de Solidaritat Catalana respondían las asociaciones obreras que escogieron agruparse bajo el nombre de Solidaritat Obrera. Sólo un año después de la fundación de la primera surgía su réplica. Justo ahora, en 2008, se celebra el centenario del congreso de las sociedades obreras catalanas que se constituyeron como "Confederació Regional de Societats de Resistència - Solidaritat Obrera".



Despojado de la hojarasca retórica propia de la época, el manifiesto de Solidaritat Catalana de 1906, (Siguiéndolo con decisión, la voluntad catalana hará salir de las ruinas del presente una España nueva, en la que los pueblos, en viva hermandad, gozarán de prosperidad, cultura y libertad), no es muy distinto de lo que a día de hoy dirían, por ejemplo, el partido de Pujol y Mas.


Qué diferencia en cambio de lo que hoy defienden los actuales sindicatos, desaparecidos o subsumidos en la misma retórica nacionalista de los actuales partidos políticos catalanistas, con estos objetivos de Solidaritat Obrera: “procurar el mejoramiento de todos los trabajadores, favorecer su cultura intelectual, darse mutuo apoyo para la creación y fomento de sociedades obreras y educarse en el ejercicio práctico de la Solidaridad para el mejor fin de su emancipación económica y social (…), la enseñanza científica y racional ‘para los obreros y sus hijos y la relación y organización de la clase obrera bajo la base de la mayor autonomía posible”.

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Ejercicio asociado.

martes, 25 de marzo de 2008

La masacre de Katyn

Katyn es el nombre de un bosque a 18 kms de Smolensk (Rusia) donde el NKVD (el precursor del KGB), la policía política de la URSS, asesinó a 4.421 oficiales polacos en la primavera de 1940 tras el reparto de Polonia entre la Alemania nazi y la URSS. En total, 21.857 personas fueron víctimas de la operación de exterminio de la élite militar polaca, contando no sólo las víctimas de Katyn, también las de otros territorios soviéticos hoy pertenecientes a Rusia, Ucrania y Bielorrusia. Los comunistas usaron balas alemanas vendidas por la República de Weimar para inculpar a los alemanes. Pero los asesinatos ocurrieron en territorio ocupado por la URSS en abril-mayo de 1940.

Durante años hubo un ominoso silencio sobre este asunto, tanto en la propia URSS como en los partidos de la izquierda europea. Todavía hoy la fiscalía militar rusa mantiene cerrada la investigación sobre Katyn en 2004 y secretos 116 tomos, de los 183 tomos del caso. La fiscalía militar se niega a examinar las peticiones para rehabilitar a las víctimas de aquella represión.

En 2005, el Parlamento polaco exigió que el fusilamiento de Katyn fuera reconocido como un acto de genocidio.

Wajda, hijo de una de aquellas víctimas de Katyn, ha realizado una película sobre el destino de uno de aquellos oficiales, su padre, y el de la esposa que nunca supo las circunstancias de su muerte. Rusia se niega a que la película pase por la tele estatal.

lunes, 24 de marzo de 2008

La retórica extremista (Antony Beevor)

La Guerra Civil española es una cuestión que después de más de 70 años sigue siendo objeto de confrontación no sólo entre españoles sino también entre historiadores. En general, los dos bandos que se forjaron en 1936 han continuado la guerra, ahora incruenta, a través de escritores y políticos, a la hora de fijar los hechos y la interpretación de aquel suceso histórico. Esa sorda pelea ha impedido hasta ahora que se abriera paso una Tercera España más imparcial y objetiva.

Son muy clarificadoras algunas de las respuestas de Antony Beevor en una reciente entrevista en El País.

Este historiador británico se ha hecho famoso por abordar con objetividad y con abundante documentación dos grandes batallas de la segunda guerra mundial, Stalingrado y Berlín. También es autor de una historia de la Guerra Civil española


Entresaco estas opiniones:

¿Cómo se pudo meter España en una guerra civil cuando los que querían guerra eran muy pocos? La mayoría de la población no quería la guerra pero se vio forzada por los extremistas de ambas partes.

Ningún país ha sufrido más que España a causa de la retórica extremista. La retórica de Calvo Sotelo o de Largo Caballero. Algunos dicen que las palabras no matan, pero yo no lo creo. Las palabras matan, pueden matar.

Y este diálogo:

P. La derecha nunca consideró oportuno condenar el golpe.

R. Como la izquierda, que no condenó el golpe de 1934.

P. ¿Tenía que haberlo hecho?

R. Sí, si eso hubiera sido significativo. El debate sería mucho más honesto si la izquierda también aceptara sus errores.

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Ejercicio asociado.